Cattiva, de Cattiva

La paliza de los riffs atronadores

Por Damián Jarpa

Muchas veces los comienzos tienen un trasfondo de traspiés, proyectos a medio terminar o que se esfumaron demasiado pronto. Es el caso del dúo Cattiva, compuesto por el guitarrista y bajista inglés Adrian Cottrell, integrante de la banda británica Chariots, y el baterista argentino Nahuel Sanguinetti, con un curriculum vitae que incluye conjuntamente dos interesantes bandas del underground pesado porteño: Antedios y Stilte. En 2017 deciden formar Cattiva a contrapelo de los músicos y profesionales que emigran al exterior, editando su primer álbum en septiembre de 2019, grabado a principio del mismo año. En los ocho temas instrumentales que componen el trabajo de estudio hacen gala de un eclecticismo y un delicado tacto para los quiebres de ritmo que los hermana con la banda norteamericana liderada por Ash Bowie, nacida y sepultada en la década del noventa y resucitada en 2008, Polvo. Entre el stoner rock, el heavy y la psicodelia, Cattiva emprende un juego musical peligroso con el noise que los lleva a lucirse tocando entre lo melódico y los límites de cada género.

 

El resultado es definitivamente ambicioso y lleno de ideas que fluyen de principio a fin. Introductions le hace honor a su título y proyecta la temperatura del disco para dar paso a Al Suelo, el tema más stoner del lote, para después pasar a Pernambuco, una canción de más seis minutos que comienza con una melodía de post rock para transformarse en un tema punk y convulsionarse en un serpenteante riff que noquea hasta a quien tiene la mejor guardia. Fire Run with Me es una composición espesa y desgarradora de cinco minutos y medio con un alto nivel de tensión en un constante in crescendo.

 

Saldías Apocalypse hace referencia y homenaje al Polo Saldías, la icónica usina cultural que fue utilizada por músicos legendarios del rock vernáculo al igual que por figuras de las artes plásticas, que asimismo sirvió de lugar para la preparación del disco de la banda, una comarca desolada y pegada a las vías del ferrocarril Belgrano Norte entre la Villa 31 y el Malba, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El nombre por supuesto juega en un tono satírico con esta contradicción porteña que separa el yin del yang.

 

Riffs angulares, cambios de ritmo y estruendos sonoros son moneda corriente en Bulldozer, probablemente el tema más ambicioso e intuitivo del disco por sus explosiones y su comienzo repleto de graves por doquier, que refleja el espíritu del álbum orientado a jugar con la tensión del oyente. Elixir, el último tema del disco, es definitivamente asfixiante pero todavía hay lugar para esa interrelación adictiva entre delays y reverbs, los cuales le dan a la canción un saludable sustrato de caos controlado. Cattiva es así un álbum que nos regala una música que no conoce la ortodoxia y que sin renegar de la melodía plantea como finalidad la convulsión sonora del oyente extasiado. Como coda final, aquí dejamos el link al Bandcamp de los muchachos, hoy por hoy ya separados: https://cattiva.bandcamp.com/.

 

Cattiva, de Cattiva (2019)

Tracks:

  1. Introductions
  2. Al Suelo
  3. Pernambuco
  4. Fire Run with Me
  5. Saldías Apocalypse
  6. Bulldozer
  7. Morning (Capriccio)
  8. Elixir