Memory: The Origins of Alien (2019), de Alexandre O. Philippe:
PELÍCULAS SOBRE PELÍCULAS
En las montañas de la locura
Sin duda alguna Alien, el octavo pasajero (Alien, 1979) es una de los mejores films de ciencia ficción y terror de la historia del séptimo arte. Producto de la mente del talentoso guionista Dan O’Bannon en colaboración con Ronald Shusett y con la dirección de Ridley Scott, el film caló hondo en el imaginario cinematográfico a partir de una historia claustrofóbica, una heroína amazona de gran carácter y un monstruo alienígena antológico salido de la mente del artista plástico suizo Hans Ruedi Giger. El documental de Alexandre O. Philippe, Memory: The Origins of Alien (2019), recupera las vicisitudes de la filmación, las influencias literarias y cinematográficas de la trama y el rol de todo el equipo, léase los actores, guionistas, productores y directores de arte, para configurar el proceso de creación de este clásico del terror espacial que tuvo secuelas dirigidas por James Cameron, David Fincher y Jean-Pierre Jeunet. Desde la influencia de los cómics hasta la clara presencia de elementos de la obra literaria del escritor estadounidense Howard Phillips Lovecraft, especialmente de su novela En las Montañas de la Locura (At the Mountains of Madness, 1936), y de los resabios de las ideas que tenía el director chileno radicado en Francia Alejandro Jorodowsky para su versión cinematográfica de la venerada novela de ciencia ficción de Frank Herbert, Duna (Dune, 1965), proyecto que no prosperó pero que finalmente fue llevado al cine unos años después por David Lynch retomando algunas de las ideas diagramadas por Jorodowsky, Phillipe traza un pasado con las ideas precursoras de Alien, los elementos que se fueron agregando y los que desaparecieron, las inspiraciones que produjeron las ilustraciones de Giger compiladas en el libro Necronomicon, nombre del grimorio mencionado en las obras de H.P. Lovecraft, y las diferencias con Dark Star (1974), film de John Carpenter con un guión en colaboración con O’Bannon, del que se retomaron algunas ideas y se descartaron muchas otras. El documental también analiza los simbolismos sexuales y las referencias eróticas, los elementos precursores del feminismo y las reminiscencias a la obra del artista francés Jean Giraud, conocido bajo el seudónimo de Moebius. Con material de archivo de la fimación que incluye breves comentarios de O’Bannon y Ridley Scott, y entrevistas a varios de los actores, a la esposa de Dan O’Bannon, a Ronald Shusett, a productores, a especialistas de diversos géneros y varios integrantes del equipo técnico y artístico, el documental analiza la génesis de la historia, su odisea hasta los sets de filmación y las dificultades para crear algunas de las escenas más icónicas e inolvidables del cine de terror y ciencia ficción en una época donde las escenografías y los efectos especiales eran creados artesanalmente a partir de los materiales y el presupuesto disponible. Memory: The Origins of Alien se centra en la visión de Alien de O’Bannon, pero desgraciadamente adolece de algún material adicional de Sigourney Weaver y Ridley Scott, único pecado de un documental que aun así señala la importancia de ambos en un film en el que siempre hay algo nuevo por descubrir.
L’Homme Fidèle (2018), de Louis Garrel:
COMPETENCIA OFICIAL INTERNACIONAL
Tríos
En su segundo largometraje como director, el popular actor francés Louis Garrel, hoy en conjunto con el reverenciado colaborador de Luis Buñuel, Jean-Claude Carrière, quien participó en algunos de los films más importantes del realizador surrealista aragonés como El Fantasma de la Libertad (Le Fantôme de la Liberté, 1974), El Discreto Encanto de la Burguesía (Le Charme Discret de la Bourgeoisie, 1972) y Ese Obscuro Objeto del Deseo (Cet Obscur Objet du Désir, 1977), presenta una comedia romántica sobre una pareja separada y reunida años más tarde por el destino. El film comienza con una confesión de Marianne (Laetitia Casta), una bella joven a su novio, Abel (Louis Garrel). Mientras el muchacho se prepara para ir a trabajar la mujer le dice que está embarazada de Paul, un amigo de la pareja, con quien la fémina tiene una aventura amorosa desde hace un año. Abel decide no luchar por su amor y seguir con su vida a pesar de estar muy enamorado de Marianne, pero nueve años después Paul fallece de un repentino ataque al corazón mientras duerme y el reencuentro entre los amantes renueva la relación a pesar de la oposición de Joseph, el hijo de Marianne y Paul, que insinúa que su madre puede haber estado involucrada en la muerte de su padre. A su vez, la hermana menor de Paul, Eve (Lily-Rose Depp), tiene una obsesión con Abel, del que está completamente enamorada desde que era chica. Con la pareja en su mejor momento Eve le confiesa a ambos que está enamorada de Abel y que pretende que Marianne se aleje de su amante, pero ella también está enamorada de Abel y decide poner a prueba su relación incitando al hombre a abandonarla por la joven enamorada. L’Homme Fidèle (2018) construye una trama romántica de abandonos, reencuentros y obsesiones amorosas alrededor de una pareja que debe soportar el deseo de otros que irrumpen en su relación para romperla, pausarla y complicarla. Con pequeños toques de humor muy certeros y un gran manejo de todos los géneros, el film de Garrel desarrolla una comedia atípica centrada en el empoderamiento de la mujer y la docilidad masculina sobre la necesidad de sentirse amado, las trampas de la fortuna y la devoción por el objeto del deseo, adoración que se pierde apenas deja de ser imposible y se vuelve una relación tangible. Con muy buenas actuaciones de Lily-Rose Depp, Laetitia Casta, Joseph Engel y del propio Garrel, y una gran labor de dirección de este último al construir climas que cambian rápidamente de la comedia al suspenso y el drama, la película francesa ofrece una narración amena y fluida para una historia sobre el misterio de los sentimientos en la que es notoria la influencia sardónica de Jean-Claude Carrière al momento de ironizar con una mirada jovial en torno a la banalidad de los conflictos amorosos.
Cronofobia (2018), de Francesco Rizzi:
COMPETENCIA OFICIAL INTERNACIONAL
Unidos por la tragedia
En Lugano, al sureste de Suiza, un hombre que trabaja descubriendo pequeñas estafas de individuos sospechados por sus empleadores entabla una extraña relación platónica con una mujer perturbada que solo puede dormir junto a él mientras éste conduce alrededor de la ciudad. Ambos parecen agobiados por un fuerte trauma reciente del que no pueden sustraerse y que los lleva a estar juntos a pesar de ser completos desconocidos, pero de a poco se irán abriendo y descubrirán qué es lo que se esconden mutuamente, revelando así la fuente de sus profundas heridas a la persona anónima con la que deciden compartir un tiempo que los sojuzga. Francesco Rizzi crea junto a la guionista Daniela Gambaro un film sobre la imposibilidad de reconocer que lo que se perdió nunca va a regresar, que la vida sigue y hay que reconstruir los lazos cortados con un mundo que de repente se cierne tan sombrío. Ambos personajes están unidos por un vínculo muy fuerte e inexplicable que los impele a depender del otro a pesar de no conocerse para nada en una situación que en otro contexto podría ser considerada completamente anormal y peligrosa. En el caso de Anna, la mujer desarrolla la necesidad de cercanía y de revivir el pasado de felicidad perdido, mientras que Michael tiene algo que confesarle a Anna, un secreto que lo carcome que tiene que ver con su desagradable profesión y su marido fallecido. Cronofobia (2018), un trastorno de ansiedad ante la angustia del paso del tiempo, hace referencia a la imposibilidad de regresar a la vida previa, al punto de quiebre que cambió todo, al devenir antes del trauma que transformó el placer y la felicidad en desazón permanente, fetiche y obsesión. El primer largometraje del realizador suizo de la región de habla italiana es un film post trágico sobre el drama que acontece una vez que la debacle ha destruido las vidas de las personas. Obra incómoda, de sonidos perturbadores que desconciertan y planos desgarradores y desestabilizadores, Cronofobia narra la relación de la singular pareja revelando el pasado con mucho cuidado para construir una trama oculta que reniega de salir a la luz. Los indicios se van convirtiendo en hechos y los hechos en certezas que lastiman en una relación imposible de dos seres lacerados que necesitan un hombro para descansar y confesarse.