Reseñas

Selección de Films Musicales, Volumen 1

Por Enrique D. Fernández

The Doors: El libertino

 

Inmerso en su galardonado período de raigambre documentalista durante los ochenta, Oliver Stone parecía seguir nutrido por los acontecimientos biográficos que lo marcaron mientras integraba el servicio militar a fines de los sesenta, soportando de forma drástica la agitación social frente al clima político que se respiraba. Con The Doors buscaría alumbrar esa porción contracultural mediante la biopic del legendario grupo que intercaló melodías bluseras sobre manifiestos poéticos, reconstruyendo la imagen inmortalizada de un Jim Morrison (notable laburo de Val Kilmer) detonado por la fama en el mismo momento en que lideraba una revolución espiritual.

 

Desde su vagabundeo en las costas californianas como cineasta frustrado hasta el exilio parisino que lo encontraría como un ídolo decadente, Stone sostiene con eficacia un relato de instancias verídicas y pasajes místicos para transparentar los avatares de una comunidad norteamericana en estado revolucionario. La película termina plasmando el ascenso y la debacle del rockstar como un performer lunático, venerado por desatar su libido en presentaciones colapsadas pero salteando las sesiones de grabación. Al momento de su estreno The Doors fue vapuleada por la crítica, la cual encontraba descuidado todo el aspecto artístico del genio compositor, y condenada al ridículo por los otros integrantes del grupo.

 

The Doors (Estados Unidos, 1991)

Dirección: Oliver Stone. Guión: Oliver Stone y Randall Jahnson. Elenco: Val Kilmer, Meg Ryan, Kyle MacLachlan, Frank Whaley, Kevin Dillon, Michael Wincott, Michael Madsen, Dennis Burkley, Billy Idol, Kathleen Quinlan. Producción: Bill Graham, Sasha Harari y A. Kitman Ho. Duración: 140 minutos.

 

 

The Harder They Come: Busco mi destino

 

En una Jamaica signada por la miseria, un temprano Jimmy Cliff arriba como buscavidas desganado con un par de canciones en el bolsillo para abrirse camino frente a los basurales caribeños. Lo que se cocinaba a través de sus calles de tierra era la impronta de los sellos, hacedores del roots reggae y sus derivados, los cuales encontrarían un mercado más allá del Tercer Mundo. Grabar un simple o morirse de hambre es el razonamiento de “rude boy marginal” que le cabe a Ivanhoe Martin, en la piel de Cliff, quien disfruta de las mieles de la idolatría luego de que The Harder They Come, su “one-hit wonder”, comience a rotar gracias a su fama como forajido de los barrios bajos.

 

El film homónimo se convertiría en el retrato insignia de la escena cultural jamaiquina en un período casi distópico que busca enlazar el mito de una leyenda gangster de los años cuarenta con el fenómeno reggae, que llamaba la atención en diferentes partes del mundo durante los setenta. La intención ficticia del personaje y su destino como ídolo caído dejan afuera aspectos como el rastafarismo, que bien pudo haber gozado de una posición propagandística. El soundtrack difundiría un legado de leyendas como por ejemplo Desmond Dekker y The Melodians, además del poderoso Many Rivers to Cross, del mismísimo Cliff.

 

The Harder They Come (Jamaica, 1972)

Dirección: Perry Henzell. Guión: Perry Henzell y Trevor D. Rhone. Elenco: Jimmy Cliff, Janet Bartley, Carl Bradshaw, Ras Daniel Hartman, Basil Keane, Bob Charlton, Winston Stona, Lucia White, Volair Johnson, Beverly Anderson. Producción: Perry Henzell. Duración: 103 minutos.

 

Head: Frenesí

 

Es sabido que los Monkees surgieron como la némesis estadounidense que le haría frente a la beatlemanía, aunque los cuatro voluntarios antes que músicos eran actores. Comenzaron siendo las marionetas autómatas de una serie televisiva para luego tomar más control artístico respecto a las canciones y permitirse tocar sus propios instrumentos. Ante el “big bang arty” de 1967, muchos empezarían a experimentar con el poderío de los happenings mediante cortos cinematográficos. Los de Liverpool hicieron Magical Mystery Tour, y un año más tarde los Monkees estrenaban Head.

 

La película era una sátira disfuncional con la banda misma librada en un contexto surreal, ideado por el gran Jack Nicholson, al que lo habían inspirado el LSD y las visiones caleidoscópicas del momento. El film es un collage maravilloso de viñetas disparatadas, donde los músicos van desfilando por diferentes sets de filmación y hacen una parodia de ellos mismos (un grupo de actores encubiertos queriendo ser estrellas de rock). Head se convirtió en el suicidio comercial de los Monkees, aunque gracias a ella el mundo comenzaría a tomarlos mucho más en serio.

 

Head (Estados Unidos, 1968)

Dirección: Bob Rafelson. Guión: Bob Rafelson y Jack Nicholson. Elenco: Davy Jones, Micky Dolenz, Michael Nesmith, Peter Tork, Victor Mature, Annette Funicello, Timothy Carey, Logan Ramsey, Jack Nicholson, Dennis Hopper. Producción: Bob Rafelson y Jack Nicholson. Duración: 86 minutos.